Tu cerebro es una maravillosa maquina para producir ideas. Una sola idea tuya te puede cambiar la vida. Una sola idea tuya le puede cambiar la vida a muchas personas. Una idea tiene la capacidad de cambiar al mundo.
Es muy probable que en este momento, como la mayoría de las personas, te asalten dudas, tal vez hagas una mueca sarcástica, o incluso pienses: "este idiota es puro bla bla bla".
No soy de los que me gustan los discursos adrenalínicos, ni andar de porrista para almas desmoralizadas, o buscar el discurso fácil y simplón. No es mi estilo.
Si realmente piensas que lo que estoy diciendo no es mas que una verborrea barata, de esas que salen en los infomerciales. Detén la lectura y te deseo lo mejor en tu vida. Ni yo, ni nadie mas, puede hacer que creas en ti. De verdad, buena suerte.
Si aun continuas aquí, tal vez con un poco mas de curiosidad del que dejó de leer, te aseguro que nadie que haya logrado algo en su vida, lo hizo sin tener primero una enorme confianza en que lo podría lograr.
Hay mucha gente que navega en los niveles de la mediocridad, y la disfruta por que no tiene el deseo de salir de ella.
Esa es la razón por la que su cerebro no genera ideas, está cómodo viviendo en la mediocridad.
Si tu cerebro no está programado para generar ideas y resolver problemas, confórmate con lo que tienes a tu alrededor, por que será lo único que seas capaz de conseguir.
Si ya leiste la publicación La Suma De Todas Tus Decisiones, recordarás que mencioné que el valor que tienes en un mercado laboral, será tan alto o tan bajo, como la calidad de los problemas que puedas resolver.
Me voy a poner medio filosófico, porque es muy importante que comprendas correctamente lo que voy a decir a continuación, y que está relacionado con lo que acabo de mencionar.
Tu valor depende de tus aportaciones. El valor de una idea también depende de lo que aporte. Ambos, tu o tu idea tienen que aportar para ser valiosas.
El impacto de tu idea es proporcional a la cantidad de contribución que aporte a una persona, un grupo de personas o una sociedad.
Es importante que comprendas cual será la contribución que esa idea le ofrecerá a quien se beneficie de ella. En qué medida mejorará el nivel de vida de esa persona, grupo o sociedad.
Mientras mayores beneficios ofrezca, será más fácilmente aceptada por esa persona, grupo o sociedad.
Existen dos tipos de ideas:
- Aquellas que dependan de tu talento
- Aquellas que puedas duplicar
Las ideas que sólo dependan de tu talento están limitadas a tu disposición de tiempo. Si es alguna manualidad, estará limitada al tiempo que te tome elaborar esa manualidad. Si es reparar un coche, computadora, piano, lo que sea. Estará limitada a lo mismo.
Por ejemplo, cantar. Vamos a suponer que tienes la idea de cantar y te vas a ganar la vida dando conciertos. Cantando 5 veces a la semana, por 52 semanas, da un total de 260 conciertos. Esta sería una idea dependiente de tu talento.
Un día se te ocurre la idea de grabar tus canciones y venderlas por internet. Así que te metes en un estudio, haces el trabajo de grabar una sola vez y subes tus canciones a internet para venderlas. Esta sería una idea que puedes duplicar.
Siempre serán más rentables las ideas que puedas duplicar, que las ideas que dependan de ti, de tu tiempo y de tu habilidad.
¿Qué sigue? Compra un cuaderno o escribe tus ideas en algún editor de textos en tu computadora, iPad, tablet o celular. Si es por medios electrónicos, recuerda respaldarlas o guardarlas en algún lugar seguro. No porque te las vayan a robar, sino para que no las vayas a perder, si se quema, se descompone o te roban tu equipo.
Separa uno o varios días a la semana, y un tiempo razonable, con media hora es suficiente.
Anota todas tus ideas en ese cuaderno especial.
Escribe la fecha cuando se te ocurrió.
Escribe la contribución que aportará.
Si quieres escribe los recursos que crees necesitar, esto es opcional y sólo sirve para poner a trabajar a tu cerebro en tu idea.
Infinidad de buenas ideas han terminado en los cementerios. ¿Vas a permitir que las
tuyas también acaben ahí?
Todo depende de ti. La pregunta es: ¿Qué es lo que vas a hacer al respecto?
Recuerda que tienes una misión: Atrévete a ser grande.
HASTA LA PRÓXIMA ...
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